LAS EDADES DE JORGE
Jorge de ocho años,
No tenía prisa de nada;
No temía el reloj,
Pero temía las madrugadas.
Jorge de quince años,
No tenía prisa de nada;
Sin experiencia aprendía,
No temía las madrugadas.
Jorge de dieciocho años,
Sin experiencia y sin nada;
Al caminar con los amigos,
En busca de las madrugadas.
El Jorge de veinte años,
Con exigencia y sin nada;
Al caminar con tantos amigos,
En la búsqueda desenfrenada.
El Jorge de treinta años,
Con experiencia y sin nada;
En este sentido,
En la búsqueda desesperada
Jorge cuarenta años,
Con exigencia calculada;
Evitando el abandono,
En las fugas de las madrugadas.
El Jorge cincuenta años,
Con exigencia lavada;
Al huir del abandono,
En fugas desesperadas.
El Jorge sesenta años,
Sin necesidad de nada
Engañando el juego engaño,
Con trajes en las madrugadas.
En los últimos años,
No teniendo prisa de nada;
Sin miedo al desengaño,
Cultivando las madrugadas.
Jorge ochenta años,
Con experiencia doblada,
Esperando el reinicio,
Sin exigencia de nada.
* J.L.BORGES
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